Y un 6 de octubre se daba el peor desastre militar de la historia de Roma, donde dos ejércitos perdieron más de cien mil hombres en batalla. Para que mil cuatrocientos años después, Gregorio XIII decretara el calendario gregoriano y anulara el juliano, haciendo que la noche del 4 de octubre diera paso al viernes 15 de octubre; lo que quiere decir que en 1582 el 6 de octubre no existió. El mismo 6 de octubre que sí existió en 1966 y echó a andar el primer automóvil, igual que el de 1927 que proyectó en Nueva York "El cantante de jazz", primera película del cine sonoro. Roland Garrós nació un 6 de octubre. Blas Armando Giunta nació un 6 de octubre. Y Bette Davis murió un 6 de octubre, igual que Eduardo Mignona.
Entonces de nuevo estamos acá. Hoy es 6 de octubre, y salvo que los diarios se equivoquen lo más importante del día va a ser lo que Cristina le conteste vía Twitter a Nelson Castro, y la reacción de Amalia Granata contra Ricardo Fort.
En lo que a mí respecta, tengo dentista a las 15 h y carne al horno con verduras en el tupper. Si está naciendo una Madre Teresa de Calcuta o un Salvador Dalí, no lo sabemos. Morir espero que nadie, salvo que a alguien le calme un dolor.
Lo que me llevo es esta necesidad cotidiana de trascender, un 6 de octubre de 2010, que mañana puede ser tan importante como otros, o tan intrascendente como el que nunca existió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario